El amontonamiento de piedras se encuentra a unos pocos metros del abismo de La Caldera de Taburiente, en frente del Bejenado, lugar privilegiado para admirar sus impresionantes riscos. El hecho de que el camino de cumbre pase pegado a la estructura demuestra la extracción de piedras para señalar la ruta. Por ello, se encuentra bastante alterado, casi vaciado en el interior y con rocas que están fuera del perímetro.
Su construcción se realizó levantando un círculo de piedras de unos 8 m de perímetro, 3 m de diámetro y una altura de 0,50 m. El interior tiene una base de tierra, piedras pequeñas y otra capa de pedruscos de mayores dimensiones.
Desde el amontonamiento podemos observar, en el momento de la salida del Sol durante el solsticio de invierno, como amaga con aparecer, durante unos minutos, por lo más alto de un roque que se encuentra a unos 100 m de distancia y, sin embargo, el rayo de luz explosiona por la esquina inferior, marcando el final del trayecto sur del recorrido solar. El amontonamiento de piedras comienza a iluminarse por la esquina norte y se va llenando de luz en su desplazamiento hacia el extremo sur.
los awara buscaron la altura estableciendo un principio ideológico asociado a la topografía
"Quienes tratan de interpretar símbolos en sí mismos miran la fuente de luz y dicen:"no veo nada". Pero la fuente de luz está ahí no para que se la mire a ella, sino para que se mire y vea lo que ella ilumina. E igual pasa con el simbolismo" (Dan Sperber).
Había una época que cuantos más yacimientos prehistóricos encontraba, menos entendía la cultura awara. Ahora que hemos abierto la puerta, cuantos más encontramos, más entendemos. Así de sencillo.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario